jueves, 26 de enero de 2012

OP UD 70. Medios de comunicación y sociedad de masas.

OP UD 70. MEDIOS DE COMUNICACIÓN Y SOCIEDAD DE MASAS.
/ CS 3 UD 04. Organización política de las sociedades. Medios de comunicación.

INTRODUCCIÓN.

1. RELACIÓN ENTRE LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN Y LA SOCIEDAD DE MASAS.

2. LA SOCIEDAD DE MASAS.
ESTRUCTURA DE LA SOCIEDAD DE MASAS.
LA CULTURA DE MASAS.

3. MEDIOS DE COMUNICACIÓN.
CONCEPTO.
CARACTERÍSTICAS GENERALES.
LA COMUNICACIÓN SOCIAL.
OBJETIVIDAD DE LOS MEDIOS.
CONTROL DE LOS MEDIOS.
Los grandes grupos mediáticos.
El caso de la Unión Europea.
FUNCIONES.
Información.
Formación de la opinión pública.
Refuerzo de las estructuras sociales.
Pro­pa­ganda política.
Ocio y entretenimiento.
Publicidad y consumo.
EFECTOS.
Los grupos sociales ante los mensajes.
El periodismo en crisis.
La libertad de prensa.

4. PRINCIPALES MEDIOS DE COMUNICACIÓN.
La variedad de medios de comunicación.
PRENSA.
RADIO.
TELEVISIÓN.
CINE.
CARTELISMO.
INFORMÁTICA E INTERNET.
FOTOGRAFÍA.
CÓMIC.

BIBLIOGRAFÍA.
PROGRAMACIÓN.
APÉNDICES: 
Listado de periodistas y perfiles biográficos.

INTRODUCCIÓN.
Esta unidad didáctica (UD) es de difícil organización, porque su enunciado de medios de comunicación y sociedad de masas afecta a dos fenómenos de gran complejidad conceptual y con extensiones en distintos aspectos: políticos, económicos, sociales y cultura­les. Además, puede enfocarse desde métodos y disciplinas muy distintas: política, economía, sociología, psicología, antropología, etc. Se presta fácilmente, pues, a una fragmentación de los esfuerzos que confundiría al alumno y le desinteresaría respecto a un tema tan importante. Por ello, vamos a hacer hincapié en los aspectos más prácticos y críticos del tema relaciona­dos con la vida cotidiana del alumno, y no nos dispersaremos en metodologías de análisis semiótico e icónico, de aplicación de la teoría del caos a los mensajes, etc., que consideramos mejor que se aborden en las carreras universitarias de Periodismo u otras.   

1. RELACIÓN ENTRE LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN Y LA SOCIEDAD DE MASAS.
La sociedad del siglo XXI será la sociedad de la información. Pero en cierto modo ya es así en el siglo XX: en la sociedad actual los medios de comunicación juegan un papel preeminente, gracias a su extensión a toda la sociedad mediante las innovaciones técnicas y científicas. Ejercen una influencia sobre las masas, orientando las ideas, los gustos, el consumo, los actos...
Los medios de comunicación y la sociedad se relacionan de manera dialéctica y recí­proca. No es posible determinar con precisión la relación causa-efecto entre ambos.
La prensa, la radio, la televisión, el cine, la fotografía y la publicidad se han configurado como los grandes narradores de la actualidad. En los orígenes de estos medios se encuentra la necesidad de comunicación e información.
Durante al menos dos siglos el acceso a datos sobre la realidad nacional e internacional sólo era posible a través de la prensa escrita. A lo largo del siglo XX se han desarrollado, a gran velocidad, nuevos canales de comunicación en un proceso que, paralelamente, ha supuesto una carrera por el control de los media desde las esferas política, económica y comercial. El carácter masivo de los medios de comunicación llega al punto de determinar el curso de los acontecimientos históricos, de manera que en este fin de milenio parece que un hecho no sucede realmente si no es recogido por los medios de comunicación.

2. LA SOCIEDAD DE MASAS.
ESTRUCTURA DE LA SOCIEDAD DE MASAS.
La sociedad de masas se contrapone a la tradicional, como resultado de la Revolución Industrial del siglo XIX y el aumento de la población y de su movilidad. Los pequeños grupos sociales de la sociedad tradicional han sido sustituidos por enormes conjuntos de individuos (trabajadores empleados por cuenta ajena, profesionales, empresarios, rentistas, pensionistas, productores y consumidores) cuyas relaciones se han anonimizado y despersonalizado.

LA CULTURA DE MASAS.
La cultura de masas es una producción de los medios de comunicación, de los que constituye el contenido básico.
Para muchos intelectuales esta cultura de masas es la anticultura, un anuncio de una especie de Apocalipsis social, en el que la alta cultura se reduce al nivel más bajo posible para facilitar su captación y comprensión por la mayoría.
Esta tesis pesimista ignora que la multiplicación de medios permite la diversificación de los mensajes y de los contenidos, que pueden difundirse en múltiples niveles de compleji­dad, lo que antes no era posible. Lo que asusta a esos críticos es más bien la trivialización de los grandes temas de la alta cultura (filosofía, arte, literatura, los viajes), que ahora no son patrimonio de una minoría social rica sino que están al alcance de la mayoría de la población, al menos en Occidente. En realidad, actualmente hay muchas más publicaciones de libros y revistas, de programas de televisión y de artículos periodísticos de divulgación científica, histórica, artística, cultural o antropológica de alto nivel cultural, que en ningún otro periodo de la Historia de la Humanidad.
Más enjundia tiene la crítica de que todavía no es suficiente el nivel cultural alcanzado por las masas y que se corre el peligro de que el saber se aprenda sólo a través de la imagen y del sonido en los medios audiovisuales, en una actividad pasiva y acrítica, en detrimento de la lectura de los libros y del esfuerzo intelectual activo.

3. MEDIOS DE COMUNICACIÓN.
El 3 de mayo se celebra el Día de la Libertad de Prensa.

CONCEPTO.
En general se entiende que los medios de comunicación son los medios tecnológicos enfocados a la difusión en serie de mensajes de información.

CARACTERÍSTICAS GENERALES.
Las características generales de los medios de comunicación social son:
- Se dirigen a amplios grupos de individuos. Esto implica que se busque un mensaje dirigido a un sujeto “medio”, descartando los mensajes originales y renovadores. Son medios esencialmente conservadores.
- El público al que se dirigen es heterogéneo. Pero se critica que al difundir una cultura “homogénea”, se destruyen las características culturales de cada grupo étnico.
- La relación entre medios y público es impersonal. Los medios de masas se dirigen a un público que no tiene conciencia de sí mismo como grupo social caracterizado, por lo que no puede manifestar exigencias.
- La relación entre medios y público es simultánea e inmediata.
- Las comunicaciones de masas exigen organizaciones complejas y tecnificadas. El pago de estas inversiones exige que los medios se rijan por la ley de la oferta y la demanda, dando al público lo que desea y fomentando el consumismo para poder mantener el medio.

LA COMUNICACIÓN SOCIAL.
Los medios comunican mensajes entre los grupos sociales, los individuos o las empresas.
En la comunicación social pueden distinguirse varios elementos: sujeto transmisor, sujeto receptor, contenido significativo, órgano de transmisión, efecto determinado.
El sujeto transmisor es el propietario del medio o quien consigue los servicios de este para difundir la información.
El sujeto receptor es el destinatario del mensaje.
El contenido significativo es el contenido material y conceptual del mensaje.
El órgano de transmisión es el medio tecnológico utilizado para la difusión.
El efecto determinado es la consecuencia buscada por el sujeto transmisor: convencimiento o cambio de conducta.

OBJETIVIDAD DE LOS MEDIOS.
La información, teóricamente, ha de ser objetiva, lo que implica que se han de respetar los hechos, que ha de eliminarse toda subjetividad. Pero hay un problema: los hechos no hablan, por lo que la información sí es subjetiva.

CONTROL DE LOS MEDIOS.
Es un gran problema el dominio económico-jurídico privado o estatal sobre los medios de comunicación. Si estos son sometidos sin límite a los poderes económicos y políticos, pueden convertirse en peligrosos enemigos de la democracia pluralista, por lo que la regulación de la libertad de los medios de comunicación es uno de los mayores retos de los Estados, para que no caigan en manos de unas pocas manos.
Relacionado con esta defensa de la pluralidad, está la protección de la libertad de prensa, amenazada por los Gobiernos y los grupos de presión, a veces violentamente. La presión sobre los periodistas por su ejercicio profesional se incrementa en el mundo: si en 1995 murieron más de 50 periodistas y en 1996 había 103 periodistas encarcelados, en 2012 hubo 70 muertos y 232 encarcelados, según el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ).
Reporteros Sin Fronteras contabiliza en 2022 que un 73% de los 180 países estudiados restringe la actividad de los periodistas. España está en la posición 29. Los 10 mejores son Noruega, Finlandia, Suecia, Dinamarca, Costa Rica, Países Bajos, Jamaica, Nueva Zelanda, Portugal y Suiza. Los 10 peores son Cuba, Laos, Siria, Irán, Vietnam, Yibuti, China, Turkmenistán, Corea del Norte y Eritrea. 

Los grandes grupos mediáticos.
En las sociedades democráticas el ideal es la transparencia de la propiedad de los medios de comunicación, el pluralismo y la competencia. Se avanza sin embargo, de modo al parecer imparable, hacia una concentración de la propiedad de los medios, porque la nueva tecnología de las TIC y sus elevados costes económicos han originado, por imperativo de las leyes del mercado, enormes oligopolios de comunicación, lo que excluye a muchos grupos sociales del proceso de comunicación social.
Se forman grandes grupos internacionales, que integran en muchos casos la edición de diarios, revistas y libros, las emisoras de radio y televisión, los canales por satélite, la pro­ducción y distribución de películas, videos y discos de música. Por ejemplo, el grupo News Corporation, presidido por Rupert Murdoch, en Reino Unido y gran parte del mundo anglosajón, o el grupo Mediaset, propiedad de Silvio Berlusconi, en Italia y otros países. Estos grupos tienen medios de comunicación que incluso se dirigen a grupos sociales de opiniones distintas. )Cómo es posible? Por un lado, hay un principio de relativa autonomía de los medios (consejos de redacción, periodistas, línea editorial a largo plazo que no es fácil de cambiar), y por otro lado, hay un principio de diversificar las líneas de actuación sobre las direcciones de la opinión pública: se puede, así, influir sobre grupos sociales distintos (conservadores, liberales, socialistas o radicales de izquierda), a los que se puede llevar a un punto común en algunos casos o problemas.
Una solución parcial sería la transparencia de la propiedad de los medios. Pero, como explica el historiador Jacques Le Goff  [Entrevista sobre la historia. 1982: 17.], es un grave problema la naturaleza de los “poderes ocultos” tras los medios de comunicación. Las an­tiguas editoriales eran relativamente independientes del poder político y económico y estaban relativamente libres de presiones sociales. En cambio, en la actualidad es mucho más “presio­nante” el poder económico (financiero, industrial, comercial, estatal) tras los grandes grupos mediáticos, que dominan la televisión, la radio, las telecomunicaciones... La independencia intelectual está así amenazada y el espíritu crítico se adormece y domestica.

El caso de la Unión Europea.
La propia Unión Europea pretende regular este proceso de concentración antes que prohibirlo, pues la competitividad internacional obliga a la creación de una gran industria europea en el sector, con unos pocos “megagrupos”, pero con el límite de que ello no impida el acceso al mercado de otras empresas.
La Unión Europea ha elaborado desde 1995 una normativa para construir el mercado único de la comunicación, unificando las dispares legislaciones.

La globalización: la sociedad de la información.
El mundo vive una revolución espectacular hacia una sociedad de la información a escala global y de velocidad casi instantánea. Es un fenómeno aún poco estudiado porque sus rasgos se mueven tan deprisa que casi no hay tiempo para la reflexión ponderada.
Los Estados se preocupan por esta nueva sociedad desde una perspectiva propia de su naturaleza de poder, como refleja la respuesta represora de EE UU y sus aliados a los casos Wikileaks y Snowden, de divulgación masiva de informaciones sobre la política exterior y el espionaje estadounidense.
En un estudio conjunto, Antoni Brey, Joan Campàs, Daniel Innerarity, Gonçal Mayos, Ferran Ruiz y Marina Subirats (2011), estudian los aspectos negativos de la sociedad de la información y su tesis central es que hay una dicotomía entre los límites biológicos de los individuos y el crecimiento exponencial de la información, lo que se traduce en una ‘sociedad de la ignorancia o la incultura’, integrada por los nuevos analfabetos funcionales generados por las nuevas tecnologías.

FUNCIONES.
Los medios de comunicación existen para satisfacer necesidades sociales, que son numerosas y a menudo interrelacionadas. Así, a veces es difícil distinguir en un mensaje de Hacienda informando sobre los pagos de impuestos las distintas funciones de información, conformación de la opinión pública, refuerzo de las estructuras sociales y propaganda política. En realidad, la economía de esfuerzos lleva a que se busque lograr distintas funcio­nes con un mismo mensaje, y a que esta concatenación sea lo más indirecta posible.

Información.
Consiste en proporcionar una forma específica de saber. Se critica a los medios porque suministran tanta información sobre el presente que el individuo no puede elaborar una con­ciencia histórica y se alienta asimismo una visión pasiva y acrítica del mundo. Las cadenas y agencias informativas a menudo son criticadas por la manipulación de noticias.
La información se ha convertido en un ente que se rige por un funcionamiento autóno­mo, al que nadie escapa, desde los profesionales de la información a los receptores y los protagonistas de los hechos. Es un fenómeno organizado, dinámico, difícil de controlar, incluso por quienes han sido vistos tradicionalmente como sus actores.
La nueva lógica que rige el mensaje de los medios de comunicación es la del espectáculo: sólo ocurre lo que “pasa” en los medios, que no reflejan sólo la realidad, sino que la “recrean”. Así, la política se ha convertido en una industria de servicios, generadora de información en busca de una gratificación inmediata. La verdad se vuelve múltiple e infinita, post-moderna, por cuanto la razón ilustrada ya no sirve como modelo de interpretación de la realidad.

Formación de la opinión pública.
La opinión pública es la fuente de la autoridad y el fundamento del poder, pero se expresa en el derecho de voto y no en la opinión diacrónica de cada día, aunque la interrela­ción constante entre la sociedad y el poder político es un valor importante de la democracia. Por ello se ha definido a la prensa como el “Cuarto Poder”. Los medios de comunicación se concentran generalmente sobre los aspectos en los que quieren crear opinión, para crear una dirección de la opinión pública. El espinoso problema de distinguir entre los conceptos de multitud y público permanece irresuelto.

Refuerzo de las estructuras sociales.
Los medios han tenido históricamente un gran papel en el refuerzo de las estructuras de poder en todos los ámbitos de la vida de la colectividad. Ejemplos hay muchos: desde el arte al servicio de la glorificación del poder, hasta el control de los medios por Goebbels al servicio de la propaganda del nazismo.
Pero no todo es negativo: el diálogo social sobre el poder, para la crítica, el control o el apoyo, ocupa grandes espacios en los medios de comunicación en la sociedad actual.
Con un análisis de las noticias y su tratamiento se detecta que los medios están ali­neados según las preferencias de los grandes grupos económicos y sociales. Por ejemplo, la enemistad en España entre los periódicos “El País”, “El Mundo” y “ABC” refleja la gran división y confrontación político-social entre los grupos y partidos de centro-izquierda (EL PSOE con “El País”), centro-derecha y derecha (las dos alas del PP con los otros dos diarios, a veces sin quedar muy claro cuál es más conservador).

Propaganda política.
La propaganda política es la información que suministra el poder político y social a las bases sociales en las que quieren influir para mover sus ideas en determinada dirección. Persigue el logro de resultados ideológicos, con ventajas políticas y/o militares.

Entretenimiento.
Hay dos teorías contrapuestas sobre el entretenimiento en los medios de comunicación:
- El entretenimiento como una simple forma de diversión, de pasar agradablemente el tiempo.
- El entretenimiento como la forma más eficaz de actuar sobre las conciencias a través de la persuasión oculta. Así, los programas más seguidos de ocio actuarían como adormecedores de la conciencia crítica de los espectadores.

Publicidad y consumo.
La publicidad es la información entre los productores y consumidores. Persigue resultados comerciales, mediante el fomento del consumo.
En el siglo XXI las empresas famosas, las ‘firmas’, están cada vez menos interesadas en vender productos y más en vender modos de vida e imágenes.

EFECTOS.
Es una cuestión muy controvertida el determinar los efectos de los medios de comunicación social, por el enfrentamiento ideológico de las posturas que afirman o niegan la capacidad de la comunicación para producir ciertos efectos, como por el sentido que se atribuye a dichos efectos.
Así, ha surgido un debate sobre los efectos positivos y negativos de esta revolución de la información. Para los optimistas se ha conseguido extender la cultura y la información a todas las clases sociales o al menos a la mayoría social. Para los pesimistas los medios de comunicación de masas han favorecido muchos de los males del mundo moderno: uniformidad cultural, conformismo, sometimiento, dominio de las conciencias a través de la publicidad y la propaganda. La falta de acuerdo en este debate se debe a que este está en sus inicios y a que no hay acuerdo sobre si el hombre ha de ser medio o fin de la actividad social.
Otro aspecto del problema es cómo se consiguen los mayores efectos sobre el público. )Con una propaganda o publicidad directa y evidente o con una indirecta y oculta? La mayoría de los estudios demuestran que la primera es más eficaz a corto plazo y en situación graves y urgentes (guerras, problemas sociales), pero que la segunda es más eficaz a largo plazo si se mantiene suficiente tiempo. Es el caso de los mensajes subliminales que aparecen en los anuncios, como por ejemplo los de Coca-Cola en los carteles o las imágenes de marcas que se deslizan dentro de los decorados de las series televisivas.

Los grupos sociales ante los mensajes.
Wilbur Schramm elabora la teoría de las “categorías sociales”: hay conjuntos sociales que reaccionan ante el mensaje-estímulo de una manera uniforme. La pertenencia a una categoría social no sólo está condicionada por un determinado rol en las relaciones de pro­ducción, sino que también admite las variables de normas culturales asimiladas: nivel de educación, moralidad... Su punto de partida es la teoría de las “diferencias individuales”: los individuos no asimilan los mensajes indiferentemente sino a partir de disposiciones que varían según su formación cultural, su conformación social o según una mecánica adquirida de percepción de la realidad.

El periodismo en crisis.
El periodismo atraviesa una crisis estructural desde los años 1990 debido a la revolución tecnológica de Internet que está transformando aceleradamente los medios de comunicación de la información periodística. La cuestión es cómo lograr un modelo de negocio que aúne la prensa escrita  por Internet y que atraiga suficientes anunciantes y lectores de pago.
La crisis tecnológica se complica por su confluencia con otros factores: la crisis económica iniciada en 2008 en el mundo occidental, la presión de los grupos económicos para controlar los medios de información y hacer que sirvan sus intereses, la conversión de los periodistas en objetivo bélico, y la falta de una completa libertad de prensa en muchos países desde China y Rusia a Cuba y Venezuela.
Hay muchos ejemplos de esta presión política contra el periodismo libre: periodistas asesinados en las guerras de Irak (el caso Couso lleva abierto desde 2003) o Afganistán, el asesinato de periodistas que investigan la corrupción en Rusia o el encarcelamiento de periodistas en Egipto y Turquía.
Sin embargo, el periodismo sigue concitando muchas vocaciones entre los jóvenes, que lo consideran una profesión idealista, comprometida con la verdad y la justicia, por lo que no faltan los reemplazos generacionales, que a menudo son utilizados por las empresas periodísticas como carne de cañón para bajar los costos de producción de la información, mientras que los veteranos despedidos se buscan la vida en los recientes medios digitales, en los departamentos de prensa de las empresas o en la escritura literaria. Como el gran Eugenio Scalfari escribió: ‹‹Periodismo es gente que le dice a la gente lo que le pasa a la gente››.

La libertad de prensa.
Philip Bennett y Moisés Naím explican en La mordaza en la era digital [“El País” (22-II-2015)] que:
‹‹Dos convicciones se han asentado en el pensamiento contemporáneo sobre el periodismo. La primera es que Internet es la fuerza que más está convulsionando los medios de comunicación. La segunda es que la Red y las herramientas de comunicación e información que ha generado, como YouTube, Twitter y Facebook, están desplazando el poder desde los Gobiernos a la sociedad civil y a los blogueros, ciberciudadanos o los llamados “periodistas ciudadanos”. Es difícil no estar de acuerdo. Sin embargo, estas afirmaciones esconden el hecho de que los Gobiernos están teniendo el mismo éxito que Internet a la hora de irrumpir en los medios de comunicación independientes y condicionar la información que llega a la sociedad.
Es más, en muchos países pobres o en los que tienen regímenes autocráticos, las acciones gubernamentales pesan más que Internet a la hora de definir cómo y quién produce y consume la información. Hay un hecho sorprendente que lo ilustra: la censura está en pleno apogeo en la era de la información. En teoría, las nuevas tecnologías hacen que a los Gobiernos les sea más difícil, y en última instancia imposible, controlar el flujo de la información. Algunos sostuvieron que el nacimiento de Internet presagiaba la muerte de la censura. En 1993, John Gilmore, un pionero de Internet, declaraba a “Time”: “La Red interpreta la censura como un obstáculo que debe evitar y evadir”.
Hoy, muchos Gobiernos han aprendido a esquivar los efectos liberadores que tiene Internet. Como los emprendedores, están recurriendo a la innovación y la imitación. En Hungría, Ecuador, Turquía o Kenia, las autoridades emulan a autocracias como Rusia, Irán o China censurando noticias críticas y creando sus propias empresas estatales de comunicación. También están diseñando herramientas más sutiles para atacar a los periodistas. De esta forma, la esperanza de que Internet permitiría la proliferación de fuentes de información independientes y diversas se ha hecho realidad solo para una parte minoritaria de la humanidad, la que vive en democracias consolidadas.
Como periodistas, hemos conocido de primera mano los efectos transformadores de Internet. La Red es capaz de reformular cualquier ecuación de poder en la que la información sea una variable. Pero esto no es una ley universal. Cuando empezamos a cartografiar ejemplos de censura, nos alarmó el hecho de encontrar a simple vista tantos casos y tan descarados. Pero más sorprendente todavía es la magnitud de la censura que no se ve, y que es difícil detectar por diversos motivos. Primero, algunas herramientas de control de los medios se enmascaran como perturbaciones del mercado. Segundo, en muchos lugares, el uso de Internet y la censura se están extendiendo rápidamente de forma simultánea. Tercero, aunque Internet es un fenómeno mundial, la censura se percibe todavía como un problema local o nacional. Las pruebas indican otra cosa.››

El editorial Libertad de prensa amenazada [“El País” (3-V-2016)] aprovecha el Día Mundial de la Libertad de Prensa para reivindicarla frente a las crecientes amenazas de los Estados autoritarios:
‹‹Hoy se celebra el Día Mundial de la Libertad de Prensa, una jornada en la que organizaciones no gubernamentales aprovechan para llamar la atención sobre las amenazas que se ciernen sobre el derecho a una información independiente, plural y transparente. En muchos países, los periodistas sufren persecuciones y acoso, son hostigados, torturados y encarcelados. El año pasado, 63 pagaron con su vida el ejercicio de su profesión, según datos de Reporteros sin Fronteras, una entidad que pone el foco en cuatro países —Egipto, Turquía, Rusia y México— para denunciar la vulneración de los derechos de los periodistas a la hora de ejercer su profesión.
Los Estados totalitarios en los que la democracia brilla por su ausencia tienen en la prensa comprometida con la defensa de los derechos fundamentales a uno de sus principales enemigos. Los periodistas se han convertido en la diana de todo tipo de regímenes corruptos y en zonas cada vez más extensas de Latinoamérica son asediados por el crimen organizado, a veces con la lacerante connivencia de la policía y los poderes locales. Amedrentar a la prensa es también objetivo del terrorismo yihadista, que ha atentado contra medios de comunicación y asesinado brutalmente a reporteros occidentales secuestrados en Siria.
Las leyes antiterroristas y las políticas de seguridad —en todos los países— pueden convertirse en un serio peligro para la información. En estas circunstancias se hace necesario que tanto las organizaciones profesionales como los propios medios luchen contra los intentos de cercenar la libertad de expresión y obstaculizar el control de los gobernantes. La prensa libre es la piedra angular de una democracia y las medidas para combatir el terrorismo no pueden ser una excusa para acallarla. Y sin duda sería una mala noticia que los periodistas se lanzaran en brazos de la autocensura.››


Bennett, Philip; Naím, Moisés. La mordaza en la era digital. “El País” Domingo (22-II-2015). 

Resultado de imagen de Antonio Caño

Antonio Caño, en Amenazas a la libertad de prensa [“El País” (28-I-2017)] [
‹‹[La victoria de Trump] ha supuesto la confirmación más rotunda del éxito de la demagogia, el nacionalismo y las ideologías de odio que en los últimos años han proliferado en distintas partes del mundo. Es muy posible que la corriente no se detenga ahí. En varios países de Europa se va a poner a prueba muy pronto la fortaleza del actual sistema de democracia liberal frente a la acometida de proyectos igualmente extremistas, xenófobos y populistas.
(…) los periódicos estamos hoy obligados a hacer nuestro trabajo con menos recursos y en un entorno político que representa una seria amenaza a la libertad de expresión y muy particularmente a la libertad de prensa.
Una de las características de ese nuevo populismo en ascenso es su hostilidad con la prensa, especialmente con la prensa profesional. Con el pretexto de la presunta comunión entre los medios más implantados y un perverso 
Esta estrategia se ha hecho brutalmente obvia en Estados Unidos. [Martin Baron, director del “The Washington Post”]  enumera] la lista de improperios que Trump había vertido en los últimos meses contra los medios de comunicación, de forma más sistemática contra el suyo propio y “The New York Times”
No han sido muy diferentes los términos en que los líderes de un partido en España se han referido a la prensa y a “El País” en particular. Entre decenas de calumnias e insidias que evito enumerar para no ayudar a su difusión —la repetición de falsedades hasta convertirlas en verdad es una táctica clásica—, voy a mencionar únicamente la campaña en Twitter contra este periódico bajo el 
El propósito en todos los casos es evidente: destruido el prestigio y la credibilidad de los medios principales, nada de lo que ellos critiquen tendrá impacto entre mis seguidores. Le ha funcionado a Trump, que consiguió sobrevivir al escándalo de sus agresiones sexuales a las mujeres y que ha evitado hasta ahora presentar la declaración de impuestos que la prensa le ha reclamado. Y le ha funcionado a otros, que han podido despreciar sin aclarar las sospechas sobre sus fuentes de financiación.
Hay muchos casos similares en otros países con diferente orientación ideológica —la Polonia de Kaczynski, la Argentina de Kirchner, la Italia de Berlusconi son algunos de ellos—, todos con los mismos componentes: políticos pretendidamente antisistema, medios de comunicación tradicionales y medios de fácil creación en Internet que sirven para difundir la propaganda, las fantasías o, llegado el caso, las mentiras de quien se quiere ofrecer como alternativa al decadente sistema en vigor.
(…) Se podría decir que el desprestigio que el moderno populismo trata de causar a los periódicos solo viene a contribuir al descrédito que los periódicos se han venido labrando por sí mismos en los últimos años. Su excesiva cercanía al poder, su distancia con los lectores, su endogamia y arrogancia impidieron a veces que los diarios hiciéramos una adecuada interpretación de los hechos. En nuestra ceguera, incluso despreciamos durante bastantes años la avalancha digital que se nos venía encima y que acabaría por poner en duda nuestra existencia.
(…) Donald Trump y sus imitadores en otros países no son una pesadilla de la que nos despertaremos pronto para encontrarnos en el mismo punto en el que estábamos. Esta ola de populismo y ultranacionalismo pretende transformar radicalmente el sistema político bajo el que vivimos. Si puede, se llevará por delante la libertad de prensa. Por esa razón, la libertad de prensa, los periódicos saludables, rigurosos y libres, son el mejor dique que le podemos ofrecer.›› 

El editorial Prensa amenazada [“El País” (26-XII-2018)] asume que 2018 ha sido otro año pésimo para la libertad de prensa:
‹‹La libertad de prensa está cada vez más amenazada en todo el mundo. Los regímenes totalitarios, el narcotráfico, la corrupción y los mandatarios ultrarrepresivos no dudan en mostrar a cada instante su hostilidad hacia el periodismo libre, agredido de una manera especialmente violenta este curso. En 2018 ha habido más informadores asesinados, encarcelados y secuestrados que en años anteriores y al mismo tiempo se ha generado un significativo aumento de las violaciones de los derechos de la prensa. La organización internacional Reporteros sin Fronteras (RSF) ha contabilizado en lo que va de año 63 profesionales asesinados (un 15% más que en 2017), 348 encarcelados y 60 secuestrados. Es un balance particularmente negro si se tiene cuenta que muchos de los crímenes contra los profesionales de los medios de comunicación han sido cometidos en países en paz. Aun así, las zonas donde se han producido más muertes violentas son Afganistán y Siria, territorios envueltos en conflictos armados. En México parece ya endémico el asesinato de periodistas que investigan tramas corruptas locales, a menudo vinculadas con el crimen organizado y el narcotráfico, y el horror de la guerra en Yemen se ha cobrado la vida de varios reporteros.
De todos los crímenes, el del disidente saudí Jamal Khashoggi, columnista de “The Washington Post”, ha suscitado un intenso seguimiento internacional por las siniestras circunstancias en las que se produjo: según todos los indicios, murió estrangulado en el consulado saudí en Estambul y su cuerpo fue descuartizado. Por haberse producido en un Estado de la UE, donde la libertad de prensa es uno de los valores más sólidos, también alcanzó gran eco el asesinato del eslovaco Jan Kuciak, que investigaba conexiones mafiosas de empresarios locales.
En muchos países las agresiones a la libertad de prensa se manifiestan en forma de leyes que restringen el pluralismo informativo o de un indisimulado acoso a los medios críticos. Son preocupantes las políticas del Gobierno polaco contra la televisión pública e inquietan los arrestos y las retenciones arbitrarias en Turquía, la mayor prisión del mundo para los profesionales. Es pasmoso el odio visceral que Donald Trump exhibe hacia los periodistas y nada puede justificar la ola represiva hacia la prensa no gubernamental en Nicaragua y Venezuela.
Aunque en España la libertad de prensa no está en peligro, ha causado estupor la confiscación policial de los teléfonos móviles a dos redactores de “Diario de Mallorca” y Europa Press. Ante actos de este tipo conviene no olvidar que el periodismo independiente es un pilar básico del Estado de derecho y que socavar los cimientos de la libertad de información debilita la democracia misma.››

4. PRINCIPALES MEDIOS DE COMUNICACIÓN.


La variedad de medios de comunicación.
Los medios de comunicación son numerosos. De hecho, cualquier actividad humana de comunicación es un medio, como los libros, la fotografía, el comic, la música, el teléfono o incluso el habla cuando es sistemática y organizada por un grupo social (por ejemplo la propaganda política “boca a boca”). Pero en los estudios científicos se reducen a los prin­cipales, que utilizan la más alta tecnología o elementos de una compleja estructura económica a fin de llegar a amplias masas humanas, como son la prensa, radio, televisión, cine y actual­mente Internet. Los demás son considerados secundarios respectos a estos medios principales, pero no por ello son descuidados por las empresas de comunicación o los Estados. Así, los conglomerados empresariales mediáticos norteamericanos, británicos y algunos europeos como Bertelsmann acostumbran tener editoriales de libros y revistas, em­presas de televisión por satélite, radios, compañías productoras de discos y películas, abarcando todo los productos y servicios de comunicación con un valor económico.

PRENSA.
Las gacetas semanales del siglo XVII marcan el inicio del periodismo, y en ellas se recogían noticias muy anteriores. Las noticias actuales comenzaron a salir en la prensa inglesa y alemana a principios del siglo XVIII. Su importancia política y como creadora de opinión pública, creció espectacularmente en el siglo XIX, con las tiradas masivas gracias a las rotativas, las reproducciones fotográficas mediante el huecograbado y el offset, el telégrafo y el teléfono, que permitían seguir mucho mejor la actualidad, además del desarrollo de la publicidad en sus páginas. Se diferenciaron las ediciones de prensa seria (ma­dura, respetuosa con la verdad) y amarilla (espectacular y sensacionalista); las ediciones matutina y vespertina. Se mejoró la distribución en los quioscos y se crearon grandes agen­cias de noticias que suministraban materiales a los periódicos. Las redacciones de periodistas ganaron autonomía en los periódicos más serios, hasta alcanzar un buen nivel de indepen­dencia profesional.
La prensa escrita tiene la ventaja sobre otros medios de que permite la perspectiva, reflexión y jerarquía de que carece la televisión, con su espectáculo y el aplastamiento psicológico que emana de las imágenes. Pero es esencial jerarquizar los acontecimientos en el periódico para evitar que se les banalice al colocarlos en un plano de igualdad.
Últimamente se tiende al desarrollo del diario electrónico, sin papel, en Internet, y el cambio de modelo de negocio, al bajar las ventas en los quioscos y la publicidad en la prensa está poniendo en apuros a muchos medios. Las dos grandes tendencias son cobrar por la suscripción digital y dar acceso gratuito confiando en que se gane en audiencia y publicidad.

RADIO.
El descubrimiento de las ondas hertzianas y su aplicación por Marconi fueron un gran avance de la transmisión informativa, con su generalización en los años 20. Durante la II Guerra Mundial fue el medio preferido, por la inmediatez de la transmisión.
Sirve para el entretenimiento, la cultura, la información, la propaganda ideológica... Se han desarrollado multitud de emisoras generalistas o especializadas y, pese a la competencia de los otros medios, su uso no ha disminuido significativamente, porque tiene la ventaja de que los oyentes pueden realizar otras actividades. Además, es mucho más interactivo que la televisión, porque, al ser más barato e inmediato, los oyentes pueden relacionarse y difundir sus mensajes con más profusión.

TELEVISIÓN.


La televisión es, desde mediados del siglo XX, la reina de los mass-media. Las innovaciones técnicas, como la televisión por cable y las antenas parabólicas, permiten en la actualidad la captación de decenas e incluso en algunos países de centenares de canales, fragmentando las audiencias.
Es un medio muy caro, que exige grandes inversiones económicas, lo que restringe su dominio al Estado y a los grandes grupos económicos.
La audiencia se reparte entre los programas de deportes, informativos, telenovelas, realities, cine... Debido a la abundancia de interrupciones publicitarias ha surgido el fenómeno del “zapeo”, cambio constante de canal gracias al mando a distancia. Su influencia social se deduce inmediatamente de las estadísticas: siete horas diarias está abierto el televisor en la casa de una familia media estadounidense (aunque no todos los miembros lo miran a la vez), sobre todo para los niños.
La innovación de la televisión digital nos presenta un futuro muy cercano con miles de canales de televisión, en el que los consumidores podrán elegir a la carta los programas deportivos o las películas que prefieran, comunicarse interactivamente, votar o comprar a distancia. Este panorama idílico, empero, no debe evitar que veamos el peligro de una “sociedad televisiva”.
Giovanni Sartori (profesor de las universidades de Florencia y Columbia) explica su teoría del homo videns, que sufre el “videopoder”. Su idea básica es que el acto de ver no produce cultura sino más bien el debilitamiento de la capacidad de entender: el consumo de televisión está creando un hombre empobrecido, crédulo, inocentón, marcado por la atrofía cultural. El homo videns es una degeneración del homo sapiens. La cultura se adquiere con la escritura y la lectura, pero la sociedad actual está formando niños con la imagen, concentrados en el acto de “tele-ver”, sea en las pantallas del televisor o del ordenador. Sartori incluso propone vetar el televisor, porque la abundancia de información está ocultando la incapacidad de entender. Se ha confundido pues la pasión de conocer con la de informarse, y Sartori propone que seamos mucho más selectivos en la gestión de la información, que nos concentremos en el acto de la comprensión significativa antes que en la acumulación de informaciones. Y que rehusemos caer en la tentación de ver televisión, la gran creadora de pseudo-acontecimientos, de falsas realidades, con efectos perniciosos para la democracia al ocultar lo importante a fuerza de privilegiar lo accesorio, lo sorprendente y lo banal.

CINE.
El cine, el gran arte del siglo XX al menos en difusión, ha tenido una influencia enorme en la cultura y en la educación de Occidente y su triunfo global. El modelo de vida estadounidense y la liberalización social de costumbres han penetrado profundamente a través suyo.

INFORMÁTICA E INTERNET.
Parece que la difusión de la informática e Internet es imparable. Tienen un ordenador más de un 80% de los hogares españoles y más del 90% de los hogares estadounidenses y se difunde su uso para comercio, ocio y educación; la cantidad de personas conectadas a Internet ya llega a más de 3.000 millones en 2012, casi la mitad de la población mundial.
Es un mundo que vive vertiginosos cambios en la tecnología de las telecomunicaciones, lo últi­mo son las “Autopistas de la información” (Internet), en las que el ordenador se conecta al teléfono, para crear un medio nuevo, que permite recibir la información en el propio domicilio, con una intensa interactividad y una enorme libertad de elección. El tradicional proceso de comunicación, unidireccional, de los medios al público, está cambiando gracias a la masificación digital, que permite el acceso a la creación de información de millones de personas, que difunden desde Internet sus bitácoras (o blogs), sus páginas Web, sus cuentas de Facebook o Twitter. Llega una nueva sociedad de la comunicación, masiva, planetaria, bidireccional, sin intermediarios, aparentemente libre, salvo por el control omnipresente de los Gobiernos sobre las comunicaciones, como han revelados el caso Snowden o la eficaz censura china de Internet.
Pero surge la cuestión de si la informática y las autopistas informativas no convertirán a los niños en analfabetos o incapaces de hablar y escribir correctamente en su propio idioma. Los menores de edad británicos ya pasaban en 1998 10 horas semanales y en 2012 casi se había doblado, frente al ordenador, más incluso que ante el televisor, y hacían sus deberes y jugaban frente a la pantalla, y hasta sus padres creían que les ayudaba en su educación. “Uno de cada tres escolares no lee libros fuera del horario lectivo. La misma información, filtrada a través del ordenador, les resulta sin embargo más fácil y atractiva”, se decía en 1998. Pero los resultados en la escuela británica en 2012 no confirman este optimista análisis. El ordenador puede utilizarse correctamente como un complemento del libro, del diálogo, del trabajo en grupo, pero no puede sustituir estas formas de conocimiento, porque no es interactivo personalmente y encierra al observador en el mundo cerrado de la pantalla, falsamente abierta.
Además, hay el problema de que estas tecnologías están concentradas relativamente en pocas empresas (como Google, Apple, Microsoft, Facebook, Intel...) lo que implica el peligro de que si llega a haber una corporación dominadora de la red Internet pueda controlar la vida económica y cultural del planeta en el futuro.

FOTOGRAFÍA.
La fotografía es un medio indirecto de comunicación porque requiere de otro medio para comunicarse. El desarrollo de la fotografía en el siglo XIX, un medio de conocimiento y de difusión de la imagen, se conectó con los medios de comunicación en el siglo XX gracias al fotoperiodismo, al poder reproducirse con alta calidad las fotografías en los periódicos y revistas. La agencia Magnum tuvo fotógrafos héroes, como Robert Capa, que viajaban por el mundo para hacer reportajes fotográficos sobre temas bélicos y de máxima actualidad. Es un medio muy poderoso de información y propaganda, con verdadera categoría artística en sus mejores obras, como las de Henri Cartier-Bresson, que capta el “instante decisivo”, o Sebastiao Salgado, cuyas imágenes sobre los desheredados del mundo actual conmueven a millones de personas.

CARTELISMO.
Es un arte muy eficaz para la publicidad y la propaganda, para la creación de opinión pública. Los regímenes democráticos y totalitarios cultivaron mucho esta forma en los años 1914-1945, sobre todo durante las guerras mundiales. En España su influencia fue extraordinaria durante la guerra civil. En la actualidad está limitado a la publicidad, porque la propaganda escoge medios más eficaces.

CÓMIC.
Este arte gráfico, relacionado con la fotografía, el cine, el grabado y la literatura, tiene una gran influencia sobre grandes grupos sociales, en especial el infantil y el juvenil, pero también grupos de adultos maduros, que siguen con interés personajes dotados de persona­lidad e ideología propias. En épocas recientes su difusión e importancia ideológica es rele­vante: así, el personaje de Superman, como explica Umberto Eco, es un arquetipo del héroe individualista del sistema capitalista para oponerse a las fuerzas misteriosas del mal, una metáfora del fascismo y del comunismo.

BIBLIOGRAFÍA.
Internet.
[http://elpais.com/tag/libertad_prensa/a/Un mapa de la libertad de prensa del mundo en 2015.

Blogs.
HMA 1. Mundo. Política. Dosier: Las redes sociales, la ciberseguridad y la ciberguerra.* 

HMA 1. Mundo. Dosier: La desinformación, la posverdad y las noticias falsas.*

[https://iessonferrerdgh1e07.blogspot.com/2024/06/dosier-la-desinformacion-la-posverdad-y.html]

HMA 1. Mundo. Dosier: Las filtraciones periodísticas de secretos oficiales.*

Películas.
Luna nueva’ (1940), de Howard Hawks, con Cary Grant y Rosalind Russell.
Ciudadano Kane’ (1941), de Orson Welles, con Orson Welles y Joseph Cotten.
El gran carnaval’ (1951), de Billy Wilder, con Kirk Douglas y Jan Sterling.
El cuarto poder’ (1952), de Richard Brooks, con Humphrey Bogart y Ed Begley.
Mientras Nueva York duerme’ (1956), de Fritz Lang, con Dana Andrews y Rhonda Fleming.
Primera plana’ (1974), de Billy Wilder, con Walter Matthau y Jack Lemmon.
Todos los hombres del presidente’ (1976), de Alan J. Pakula, como Robert Redford y Dustin Hoffman.
Ausencia de malicia’ (1981), de Sydney Pollack, con Paul Newman y Sally Field.
Bajo el fuego’ (1983), de Roger Spottiswoode, con Gene Hackman y Nick Nolte.
El desafío: Frost contra Nixon’ (2005), de Ron Howard, con Michael Sheen y Frank Langella.
'Spotlight' (2015), de Tom McCarthy, con Mark Ruffalo, Michael Keaton y Rachel McAdams.
Los papeles del Pentágono’ (2017), de Steven Spielberg, con Meryl Streep y Tom Hanks.

Series de televisión.
La serie televisiva británica ‘Press’.
Delclós, Tomás. El periodismo, según una serie de la BBC. “El País” (1-XII-2018). Una visión pesimista, con las ventas del papel en baja y sin ingresos del digital.

Libros.
AA.VV. Actas del seminario “Nuevos medios, nueva publicidad”, UIMP, Santander (29 julio-2 agosto 1996).

Baron, Martin. Frente al poder. Trad. de José C. Vales. Esfera de los Libros. 2024. 552 pp. Memorias del director del “The Washington Post” entre 2013 y 2021, con la pugna entre el propietario Jeff Bezos y el presidente Trump. Reseña de Petit, Quino. La guerra entre la política, la tecnología y los medios. “El País” Babelia 1.698 (8-VI-2024).

Benito, Ángel. Ecología de la comunicación de masas. Eudema. Madrid. 1989. 195 pp.
Cagé, Julia. Salvar los medios de comunicación. Anagrama. Barcelona. 2016. Vicente, Álex. Julia Cagé / Economista especializada en medios de comunicación. ‘La información es un bien público’, “El País” Ideas (24-I-2016) 8. Julia Cagé (Metz, Francia, 1984) es profesora del Instituto de Estudios Políticos de París y doctora por Harvard. Propone un modelo híbrido entre fundación y compañía para salvar a la prensa tradicional.
Casasús, José María. Ideología y análisis de los Medios de Comunicación. Dopesa. Barcelona. 1979. 184 pp.
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De la Mota, Ignacio H. Función social de la información. Paraninfo. Madrid. 1988. 324 pp.
Doyle, Andrew. La libertad de expresión. Trad. de Alejandro Pradera. Alianza. 2022. 176 pp. El escritor satírico Andrew Doyle (Derry, Irlanda del Norte, 1978). Entrevista de Valdeón, Julio. Andrew Doyle. “El movimiento ‘woke’ infecta partidos, medios e instituciones”. “La Lectura” 1 (14-I-2022). El movimiento ‘woke’ promueve las políticas identitarias, defiende la Teoría de la Justicia Social y sostiene que las instituciones están dominadas por unas tramas invisibles de poder.
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González Requena, Jesús. El espectáculo informativo o la amenaza de lo real. Akal. Madrid. 1989. 142 pp.
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Kovach, Bill; Rosenstiel, Tom. Elementos del periodismo. Aguilar. Madrid. 2012 (2003 inglés). 288 pp. ‹‹1. La primera obligación del periodismo es la verdad. 2. Debe lealtad a todos los ciudadanos. 3. Su esencia es la disciplina de verificación. 4. Debe mantener su independencia con respecto a aquellos de quienes informa. 5. Debe ejercer un control independiente del poder. 6. Debe ofrecer un foro público para la crítica y el comentario. 7. Debe esforzarse por que el significante sea sugerente y relevante. 8. Las noticias deben ser exhaustivas y proporcionadas. 9. Debe respetar la conciencia profesional de sus profesionales.››
Marín, Bernardo. La tiranía de clic. Turner. 2019. 96 pp. Ensayo. Reseña de Fernández de Lis, Patricia. Charlatanes de feria. “El País” Babelia 1.457 (26-X-2019).
Mayos, Gonçal; Brey, Antoni (eds.). La sociedad de la ignorancia. Península. Barcelona. 2011. 236 pp. Reseña de Sarabia, Bernabé. “El Cultural” (13-V-2011) 12-13. Seis profesores universitarios, Antoni Brey, Joan Campàs, Daniel Innerarity, Gonçal Mayos, Ferran Ruiz y Marina Subirats, estudian los aspectos negativos de la sociedad de la información.
McQuail, Denis. Introducción a la teoría de la comunicación de masas. Paidós. Barcelona. 2000 (1985 1ª, 1993 2ª). 632 pp. Un libro de referencia.
McQuail, Denis. Sociología de los medios de comunicación. Paidós. Buenos Aires. 1985 (1ª 1969, 2ª 1979). 165 pp.
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Mota, Ignacio de la. Función social de la información. Paraninfo. Madrid. 1988. 324 pp.
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Spring, Marianna. Among the Trolls: My Joruney Through Conspiracyland. 2024. Marianna Spring (1996) es la primera corresponsal de la BBC especializada en fake news y redes sociales. Entrevista de Aunión, J. A. Marianna Spring. “La desinformación tiende a hacerse viral porque queremos creerla”. “El País” Semanal 2.478 (24-III-2024). 

Thompson, Mark. Sin palabras. ¿Qué ha pasado con el lenguaje de la política? Debate. Madrid. 2017. Ensayo. Mark Thompson (Londres, 1957) es consejero delegado de “The New York Times” (impulsa su transformación digital) y exdirector general de la BBC. Elola, Joseba. Mark Thompson ‘La relación entre políticos, medios y público se rompe’. “El País” Ideas 98 (26-III-2017).
Wi, Tim. Comerciantes de atención. La lucha épica por entrar en nuestra cabeza. Capitán Swing. 2020. Ensayo sobre la historia de la publicidad y la propaganda. Tim Wu (Washington, 1972), hijo de madre británica y padre taiwanés, ambos inmunólogos, criado en Canadá y formado en leyes en Harvard, es catedrático de Derecho de la Universidad de Columbia, experto en medios y tecnología, especializado en legislación antimonopolio. Reseña-entrevista de Aguilar, Andrea. El negocio de controlar nuestras mentes. “El País” (29-III-2020).

Reportajes.
Harguindey, Àngels (texto); Barjau, Caterina (fotos). Un pelotón de antidivos. “El País” Semanal 1.989 (10-XI-2014) 58-63. Periodistas españoles destacados en los últimos decenios.

Noticias. Orden cronológico.
Pereda, Cristina F. Twitter censurará para crecer en países sin libertad de expresión. “El País” (28-I-2012) 30-31.
Gómez, Rosario G. Periodismo: profesión de riesgo. “El País” (8-II-2012).
Gómez, R. G.; Sahuquillo, M. R. Estrasburgo responsabiliza a los medios de comunicación ‘online’. “El País” (24-X-2013) 41. El Tribunal Europeo de Derechos Humanos establece que las webs deben poner filtros adecuados para evitar insultos.
Pozzi, Sandro. Nace un pensador global. “El País” (11-I-2014) 33. Una nueva plataforma global, “The WorldPost”, con la colaboración de Nicolas Berggruen y Arianna Huffington.
AA. VV. TeleKremlin se expande. “El País” Domingo (25-I-2015) 4-5. La expansión internacional de los medios de comunicación públicos de Rusia, China, Irán, Qatar y Venezuela.
Vicente, Álex. El otro “Charlie Hebdo”. “El País” Semanal 2.004 (22-II-2015) 34-41. La revista satírica francesa “Le Canard Enchaîné”.
Guimón, Pablo. La BBC busca su sitio. “El País” Domingo (9-III-2015) 5. Al debate sobre la financiación de la BBC británica.
Guimón, P. El grupo japonés Nikkei compra el ‘Financial Times’. “El País” (24-VII-2015) 36.
Guimón, P. La City habla japonés. “El País” (24-VII-2015) 36.
Tubella, Patricia. El grupo Pearson vende a la familia Agnelli el 50% de ‘The Economist’. “El País” (13-VIII-2015) 34.
Redacción. Amenazados por el yihadismo, limitados por el antiterrorismo. “El País” (3-V-2016). Análisis de los problemas del periodismo libre en los países más represores o inseguros: China, Arabia Saudí, Irán, Egipto, Turquía, México, Venezuela, Rusi, Ecuador.
Elola, Joseba. El guardián del ‘scoop’ valiente. “El País” Ideas (22-V-2016). Alan Rusbridger, exdirector del diario “The Guardian”, ha fracasado en rentabilizar su modelo abierto en Internet.
Llaneras, Kiko; Pérez Colomé, Jordi. España también tiene noticias falsas. “El País” (28-I-2017). Páginas webs propagan noticias falsas a través de redes sociales y consiguen cientos de miles de visitas.
Gómez, Rosario G. La libertad de prensa retrocede en los países democráticos. “El País” (3-V-2017). Noticias falsas, presiones y populismos erosionan el derecho a la información.
Jabois, M. La voladura incontrolada del yo. “El País” (12-VI-2017). Se publican las memorias del periodista estadounidense David Carr, ‘La noche de la pistola’ (Libros del KO, 2008 en inglés).
Abellán, Lucía. Un escudo para los informantes. “El País” Ideas 175 (23-IX-2018). La UE debate sobre cómo proteger a los informantes para mejor combatir la corrupción y otros delitos.
Faus, Joan. El precio de revelar secretos. “El País” Ideas 175 (23-IX-2018). Dos informantes de secretos de la NSA explican sus motivos.
De Miguel, Bernardo. Alerta en Europa ante los casos de violencia y acoso contra la prensa. “El País” (14-X-2018).
Gómez, Rosario G. Los ataques a la libertad de prensa aumentaron en 2018. “El País” (24-XII-2018). Reporteros Sin Fronteras cuenta 63 periodistas asesinados, 348 encarcelados y 60 secuestrados.

Altares, Guillermo. La ley australiana sobre las tecnológicas llega a la UE. “El País” (28-III-2021). Australia legisló sobre la compensación que Google, Facebook y otras han de pagar a los medios de comunicación.

Ayuso, S. Bruselas aspira a blindar la independencia de los medios. “El País” (17-IX-2022). La Comisión Europea presenta un reglamento para garantizar que no haya injerencia estatal o de intereses privados, y para proteger a los periodistas y sus fuentes.

Echevarría, Borja. El País acelera el paso y supera el cuarto de millón de suscriptores. “El País” (13-XI-2022). Los diarios más sólidos y rentables afianzan su modelo de suscripción digital.


Análisis y opiniones. Orden alfabético.
Aguilar, Andrea. Últimas noticias del nuevo periodismo. “El País” Ideas 163 (27-V-2018). 

Aguilar, Miguel Ángel. La sociedad de la impunidad. “El País” (24-IX-2013) 18. El periodista realza la importancia de los medios de comunicación independientes para resistir a la corrupción y las lacras de la política.

Araújo, Heriberto. El peligro de las ‘querellas mordaza’. “El País” Ideas 435 (10-IX-2023). Las causas judiciales contra los periodistas y medios en Europa se han duplicado entre 2018 y 2022.

Aznárez, Malén. El terrorismo como coartada. “El País” (3-V-2016).

De Miguel, Rafa. Lionel Barber / Exdirector del “Financial Times”. ‘Un diario debe desafiar a sus lectores naturales, darles algún codazo’. “El País” Ideas 292 (20-XII-2020).

Alandete, David. Martin Baron / Director de ‘The Washington Post’. ‘Dejaremos a Trump en evidencia cada vez que no diga la verdad’. “El País” (26-I-2017).

Bassets, Lluís. Un ídolo digital caído. “El País” Ideas 154 (29-IV-2018). Las redes sociales desvirtúan la información en el sentido tradicional.

Bauluz, Alfonso. Rigor y respeto. “El País” (24-III-2024). El presidente de Reporteros Sin Fronteras en España critica el matonismo y las amenazas a periodistas.

Baydar, Yavuz. El eclipse inminente de Turquía. “El País” (3-V-2016).

Alandete, Javier. Charlie Beckett. ‘’Hay que admitir que el periodismo no es rentable’. “El País” Ideas 113 (9-VII-2017). El profesor de la London School of Economics, fundador del ‘think tank’ Polis, analiza la transformación de los medios en la era digital.

Bennett, Philip; Naím, Moisés. La mordaza en la era digital. “El País” Domingo (22-II-2015) 2-5. Análisis de la censura de los gobiernos a los medios de comunicación y en Internet, con especial atención al caso de Venezuela, y menciones más breves a Hungría, Rusia, Ecuador, Pakistán, los países árabes...

Bergés, Laura. Un reto digital europeo. “El País” Domingo (9-III-2015) 4. Internet ha revolucionado las televisiones públicas europeas.

Caño, Antonio. Amenazas a la libertad de prensa. “El País” (28-I-2017). La eliminación de toda crítica bien fundamentada es un objetivo prioritario del nuevo populismo en su propósito último de liquidar nuestro sistema de valores y sustituir la democracia liberal por su ideología de revancha y odio.

Castro, Miguel. Un plan para el periodismo. “El País” (8-XII-2018). Una estrategia de la UE para el sector de medios de comunicación en el periodo 2019-2024.

Cortina, Adela. Periodismo imprescindible. “El País” (29-I-2018).

Cruz, Juan. Los elementos del periodismo. “El País” (13-IX-2016). Reflexión sobre casos en que los medios españoles han manipulado la realidad. Reivindica la esencia del periodismo: la verdad, la lealtad a los ciudadanos…

Gómez, R. G. Entrevista. Helen Darbyshire / Directora de Access Info. ‘Los ciudadanos tienen derecho a saber’. “El País” (21-I-2012) 32. Fomenta las leyes de transparencia, como medio de profundizar la democracia con una mayor participación de los ciudadanos y de reducir la corrupción.

De la Rica, Sara; Martínez de Lafuente, David. Combatir la desinformación: estrategias y soluciones. “El País” Negocios 2016 (23-VI-2024).

De Miguel, Rafa. El periodismo y la batalla diaria por la independencia. “El País” Ideas 292 (20-XII-2020). La independencia, el mejor negocio de los medios.

Delclòs, Tomàs. Mujeres periodistas… en el cine.  “El País” (11-IV-2020). Revisa el papel de las periodistas en series de televisión y en películas.

Galindo, Cristina. Carlos Delgado / Jefe de programas de TV de la Deutsche Welle en español. ‘La financiación no está ligada a un Gobierno’. “El País” Domingo (9-III-2015) 5. La acrisolada independencia de la televisión pública alemana.

Editorial. Libertad de prensa amenazada. “El País” (3-V-2016). El Día Mundial de la Libertad de Prensa.
Editorial. Prensa amenazada. “El País” (25-XII-2018). 2018 ha sido un año pésimo para la libertad de prensa.
Editorial. Tarea esencial. “El País” (22-III-2020). Los medios de comunicación son esenciales para la sociedad en la crisis del coronavirus.

Editorial. Periodismo bajo amenaza. “El País” (23-IV-2023).


Fuentes, Ana. Oligarcas blindados. “El País” (1-IV-2022). Crece el problema de los ricos que presionan judicialmente a los periodistas que les investigan, amenazándoles con enormes demandas económicas. Algunos países comienzan a legislar contra esta práctica que obstaculiza la lucha contra la corrupción y otros delitos.

Garton Ash, Timothy. El conocimiento en la Red, en peligro. “El País” (21-I-2012) 29. Critica la ley francesa que pretende penalizar la negación del genocidio armenio y las iniciativas contra la piratería en Internet de EE UU porque amenazan la libertad de expresión en el mundo.
Garton Ash, T. Marea contra la libertad de expresión. “El País” (19-V-2016).

Gómez, Rosario G. ¿Periodismo neutro o activista? “El País” (23-XII-2013) 26-27. El debate sobre si el periodismo debe ser aséptico o incluir opinión.

Hernández Busto, Ernesto. El periodismo fantasma. “El País” (14-X-2016). El público consume tanto información verdadera como falsa, siempre con inmediatez, sustituyendo los hechos por opiniones.

Alandete, David. Matthew Kaminski. ‘Europa necesita que la prensa la critique’. “El País” Ideas 108 (4-VI-2017). El director de “Político” en Europa reivindica la información política.

Petit, Quino. Rasmus Kleis Nielsen. “A los políticos no les gustan los periodistas. La diferencia: antes tenían que lidiar con ellos, hoy ya no”. “El País” Semanal 2.487 (26-V-2024). Nielsen (Helsinge, Dinamarca, 1983) es profesor de Comunicación Política en la Universidad de Oxford y dirige el Instituto Reuters para el Estudio del Periodismo.

León Gros, Teodoro. Alimento para nostálgicos. “El País” (31-I-2018). Un periodismo adaptado al siglo XXI.

Marí-Klose, Pau. Son los medios, ¡estúpido! “El País” (29-XI-2021). La democracia peligra por el populismo de los políticos como Trump, pero también porque los medios difunden y promueven sus mensajes.

Martínez, Ibsen. La ‘doctrina Cabello’ y la difamación. “El País” (29-VII-2016). Muchos delincuentes demandan a la prensa apoyándose en un derecho confuso o en tribunales amañados.

Mazzucato, Mariana. No retiren el apoyo financiero a la BBC. “El País” (25-II-2021). La catedrática de Economía de la Información defiende que la BBC crea valor a la sociedad.

Mota, Jesús. Manual de épica periodística. “El País” (21-I-2018). Las películas sobre la prensa.

Rose, Fleming. ¿Qué clase de civilización somos? “El País” (11-I-2015) 6-7. El periodista gráfico danés de “Jyllands Posten” reflexiona sobre el uso de la sátira ante la barbarie, tras el atentado contra “Charlie Hebdo”.

Aguilar, Andrea. Evan Ratliff / Periodista y fundador de ‘The Atavist’. ‘El periodismo siempre cuesta dinero’. “El País” Ideas (10-VII-2016). Evan Ratliff (Atlanta, 1976) es reportero y emprendedor de proyectos de periodismo digital.

Torres, Ana. John Riding / Consejero delegado de ‘Financial Times’. ‘La publicidad no soporta por sí sola una Redacción de calidad’. “El País” (4-X-2018). El diario económico ha logrado el éxito manteniendo abierta su publicación completa solo para los suscriptores, ya 930.000 en 2018.

Cruz, Juan. Alan Rusbridger. ‘Detesto el periodismo donde hay daño, hostigamiento y crueldad’. “El País” Semanal 2.238 (18-VIII-2019). Alan Rusbridger, exdirector del diario “The Guardian”.

Sahuquillo, María R. Yoani Sánchez / Periodista cubana. ‘Gozamos de más libertad porque nos la hemos tomado’. “El País” (3-V-2016).

Altares, G. Ola Sigvardsson / Ombudsman de la prensa en Suecia. ‘La prensa tiene que ser tan libre como sea posible’. “El País” Ideas (6-XI-2016).

Carbajosa, Ana. Paul E. Steiger. “El País” Semanal 2.058 (6-III-2016) 26-30. Entrevista con Paul E. Steiger (Nueva York, 1942), exdirector del “Wall Street Journal” (1991-2007).

Vallespín, Fernando. La dialéctica de la digitalización. “El País” (23-XII-2013) 25. La Red puede reducir nuestra libertad en vez de ampliarla como se soñó hace tiempo.

Walker, Christopher. Contener la democracia. “El País” Domingo (25-I-2015) 2-3. Algunos regímenes autoritarios apuestan por la expansión internacional de sus medios de comunicación para ganar influencia.

PROGRAMACIÓN.
OP UD 70. MEDIOS DE COMUNICACIÓN Y SOCIEDAD DE MASAS.
UBICACIÓN
En ESO, 1r ciclo.
El mundo actual.
Bloque: Participación y conflicto político en el mundo actual. Apartado: Cauces y retos actuales para la participación ciudadana: partidos y organizaciones sociales; institucio­nes y centros de información y ayuda ciudadana; el papel de los medios de comunicación de masas.
Bloque: Arte, cultura y so­ciedad. Apartado: Redes y medios de comunicación e información: concentración de poder, uniformización cultural y pluralismo informativo. Publicidad y consumo.
RELACIÓN CON TEMAS TRANSVERSALES.
Relación con los temas de Educación Moral y Cívica, Educación para el Consumo, Educación para la igualdad de los sexos, y Educación para la Paz.
TEMPORALIZACIÓN.
Cuatro sesiones de una hora.
1ª Documental sobre los medios de comunicación. Diálogo, con evaluación previa. Exposición del profesor. Cuestiones.
2ª Exposición del profesor. Cuestiones.
3ª Exposición del profesor, de refuerzo y repaso; esquemas, gráficos y comentarios de textos.
4ª Comentarios de textos; debate y síntesis.
OBJETIVOS.
Sintetizar los diferentes medios de comunicación.
Comprender la relación entre los medios de comunicación y la sociedad de masas.
Analizar la relación entre la información y la opinión pública.
Analizar la relación entre los mensajes publicitarios y el consumo.
CONTENIDOS.
A) CONCEPTUALES.
Los medios de comunicación y la sociedad de masas.
La información y la opinión pública.
Los mensajes publicitarios y el consumo.
B) PROCEDIMENTALES.
Tratamiento de la información: realización de esquemas del tema.
Explicación multicausal de los hechos históricos: en comentario de textos.
Indagación e investigación: recogida y análisis de datos en enciclopedias, manuales, monografías, artículos...
C) ACTITUDINALES.
Rigor crítico y curiosidad científica.
Tolerancia y solidaridad.
Valorar la solución pacífica de los conflictos nacionales.
METODOLOGÍA.
Metodología expositiva y participativa activa. El profesor debe evitar el adoctrinamiento de los alumnos y favorecer que estos desarrollen posturas propias, mediante la reflexión crítica y el diálogo.
MOTIVACIÓN.
Un documental sobre los medios de comunicación, con un diálogo que sirva para la evaluación previa.
ACTIVIDADES.
A) CON EL GRAN GRUPO.
Exposición por el profesor del tema.
B) EN EQUIPOS DE TRABAJO.
Realización de esquemas sobre los apartados de la UD.
Realización de un esquema gráfico sobre la relación entre la información y la publicidad respecto a la conformación de la opinión pública y el consumo.
Análisis de la información de distintos medios de comunicación sobre un mismo hecho.
Análisis de la publicidad de un producto.
Comentarios de textos sobre información, ética del periodista, publicidad, opinión pública, etc. Se hará un análisis y un debate, con conclusiones individuales, que serán entregadas al profesor para su evaluación.
C) INDIVIDUALES.
Realización de apuntes esquemáticos sobre la UD.
Participación en las actividades grupales.
Búsqueda individual de datos en la bibliografía, en deberes fuera de clase.
Contestar a cuestiones, con debate de grupo aunque con respuesta individual.
RECURSOS.
Presentación digital.
Libros de texto, manuales.
Fotocopias de textos para comentarios.
Cuadernos de apuntes, esquemas...
Documental.
EVALUACIÓN.
Evaluación continua. Se hará especial hincapié en que se comprenda la relación entre los procesos de información y publicidad y el desarrollo de la opinión pública y el consumo en la sociedad de masas.
No habrá examen, pues se valorarán sobre todo los procedimientos y actitudes, y los conceptos serán ya suficientemente evaluados en las actividades prácticas y en las cuestiones.
RECUPERACIÓN.
Entrevista con los alumnos con inadecuado progreso.
Realización de actividades de refuerzo: esquemas, comentario de textos...

APÉNDICE: LISTADO DE PERIODISTAS, POR PAÍSES Y ORDEN CRONOLÓGICO.
Alemania:
Ernst Cramer (1913-2010, periodismo), Peter Scholl-Latour (1924-2014, periodismo de reportaje), Günter Wallraf (1941, periodismo), Frank Schirrmacher (1959-2014),

EE UU:

Walter Lippman (1889-1974).

Henry Mencken (1880-1956, periodismo, ensayo), Walter Lippmann (1889-1974, periodismo político),
Erni Pyle (1900-1945, periodismo de guerra), Walter Cronkite (1917-2009, periodismo político), Daniel Schorr (1917-2010, periodismo televisivo), Edwin Guthman (1919-2008, periodismo político),
Ben Bradlee (Boston, 1921-Washington, 2014), Osborn Elliott (1925-2008, periodismo político), David Broder (1929-2011, periodismo político), Jack Nelson (1929-2009, periodismo político), Gay Talese (1932, periodismo político), David Halberstam (1934-2007, periodismo), Janet Malcolm (1935-2021), William R. Stall (1937-2008, periodismo político),
Michael Meyer (1952, periodismo, Europa del Este), Thomas L. Friedman (1953, periodismo), Jill Abramson (Nueva York, 1954), Michael Pollan (Long Island, 1955, periodismo de alimentación y gastronomía), Jon Lee Anderson (1957, periodismo internacional), Nicholas Kristof (1959, periodismo), Sheryl WuDunn (1959, de origen chino; esposa de Kristof; periodismo),
Dexter Filkins (1961, periodismo), Philip Gourevitch (1961, periodismo sobre violencia en África e Irak), Christopher Caldwell (1962, periodismo sociológico),

El Salvador:
Carlos Martínez D’Abuisson (1978),

España:

Eduardo Haro Tecglen (1924-2005).

Guillamet, Jaume. Obituario. Carlos Sentís, periodista de un siglo. “El País” (20-VII-2011) 32. Carlos Sentís (Barcelona, 1911-2011), periodismo político y cultural.
Julio Camba (1882-1962, periodismo), Gaziel (Agustí Calvet) (1887-1964, periodismo en español, memorias en catalán), Fernando Vela (1888-1966, ensayo, periodismo cultural), Manuel Chaves Nogales (Sevilla, 1897-Londres, 1944, periodismo, biografía Belmonte), Just Cabot (1898-1961, periodismo),
Carlos Sentís (Barcelona, 1911-2011, periodismo político y cultural), Vicente Cebrián (1914-2010), Joaquín Soler Serrano (1919-2010, periodismo, entrevista cultural), Eugenio Suárez (Daimiel, Ciudad Real, 1919-2014, periodista, director de “El Caso” y “Sábado Gráfico”), 
Antonio D. Olano (Antonio Domínguez Olano) (1922-2012, periodismo), Néstor Luján (1922-1995, periodismo), Eduardo Haro Tecglen (1924-2005, periodismo, memorias), Carlos Nadal Gaya (1924-2010, periodismo de política internacional en “La Vanguardia”), Jesús de la Serna (1926-2013, periodismo),
Federico Abascal (1930-2016), Carlos Mendo (1933-2010, periodismo), Javier Pradera (1934-2011, periodismo político), Pedro Altares (1935-2009, periodismo), Luis María Ansón (1935, periodismo), Jesús Hermida (1937-2015), Josep Maria Huertas Clavería (1939-2007, periodismo), Fernando Pérez Ollo (Pamplona, 1939-2011, periodismo cultural y político),
Julio Alonso (1940-2009, periodismo), Miguel Ángel Bastenier (Barcelona, 1940-Madrid, 2017), Manuel Leguineche (Arrazua, Vizcaya, 1941-Madrid, 2014, periodismo, literatura de viajes),  Juan Cueto (Oviedo, 1942-Madrid, 2019, periodismo cultural), María Antonia Iglesias (1945-2014, periodismo), José María Izquierdo (Madrid, 1946, periodismo político), Joaquín Ibarz (Zaidim, Huesca, 1947, periodismo internacional en Latinoamérica para “La Vanguardia”),
Joaquín Prieto (1951-2017), Jesús Mota (Bilbao, 1952-Madrid, 2020, periodista económico y crítico de cine), Álvaro Delgado-Gal (1953, periodismo), Juanjo Navarro Arisa (1955-2017), Jacinto Antón (Barcelona, 1957, periodismo cultural), Agustí Fancelli (Barcelona, 1957-2013, periodismo cultural), Alfonso Armada (Vigo, 1958, periodismo), Concha García Campoy (1958-2013, periodismo radiofónico y televisivo), Hermann Tertsch (Madrid, 1958, periodismo político), Enrique González (Barcelona, 1959, periodismo internacional), Josep Maria Sarriegui (1961-Palma de Mallorca, 2011),
Guillermo Abril (periodismo de reportaje), Ibáñez Escofet (periodismo), Joaquín Ventalló (periodismo), Josep Maria Cadena (periodismo), Iñaki Gabilondo (periodismo),

Francia:
Jean Lacouture (1921-2015).
Albert Londres (1884-1932, periodismo), Jean Lacouture (1921-2015), Jean Daniel (1920, periodismo, ensayo, memorias), Philippe Gourevitch (periodismo),

Italia:

Indro Montanelli (1909-2001).
Indro Montanelli (1909-2001, periodismo, historia), Eugenio Scalfari (1924, periodismo), Edmondo Berselli (1951-2010, periodismo),

México:
Alma Guillermoprieto (1949, periodismo), Sergio González Rodríguez (Ciudad de México, 1950-2017),

Nicaragua:
Octavio Enríquez (1979),

Perú:
Enrique Zileri (1931-2014, periodista de investigación),

Reino Unido:


Christopher Hitchens (1949-2011).

William Howard Russell (1820-1907, periodismo), Clement Freud (Viena, 1924-2009, periodismo), William Rees-Mogg (1928-2012, periodismo), Peter Preston (1938-2018, director de “The Guardian” en 1975-1995), Christopher Hitchens (Portsmouth, 1949-2011, británico nacionalizado estadounidense en 2007; periodismo, entrevista, ensayo, crítica literaria), Alan Rusbridger (Zambia, 1953, periodismo), Misha Glenny (1958, periodismo),
Patrick Holford (periodismo de alimentación y gastronomía),

Venezuela:
Teodoro Petkoff (1932, periodismo político), Moisés Naím (1952, periodismo, ensayo), 

Perfiles biográficos. Orden alfabético.
La periodista estadounidense Jill Abramson (1954).
Carbajosa, Ana. Jill Abramson. “El País” Semanal 2.008 (22-III-2015) 20-24. Jill Abramson (Nueva York, 1954), primera directora de “The New York Times”, en 2011-2014.

El periodista estadounidense Ben Bradlee (1921-2014). 
Ben Bradlee (Boston, 1921-Washington, 2014), periodista estadounidense, exdirector del “Washington Post”, ayudó a destapar el “caso Watergate” contra Nixon.
Basterra, Francisco G. Obituario. Ben Bradlee, gigante del periodismo. “El País” (23-X-2014) 44. 

El periodista estadounidense Robert Caro (1935).

Mars, Amanda. El reportero más perfeccionista del mundo muestra sus obsesiones. “El País” (21-XI-2021). El periodista estadounidense Robert Caro, biógrafo del presidente Lyndon B. Johnson (The Years of Lyndon Johnson, cuatro volúmenes ya publicados dese 1982 y el quinto en proceso) y del urbanista neoyorquino Robert Moses (The Power Broker, 1974), en libros con los que ganó dos premios Pulitzer.


El periodista francés Jean Daniel (1920-2020).
El cofundador en 1964 de “Le Nouvel Observateur” entendía al periodismo como un arma para intervenir en la realidad.
Bassets, M. Obituario. Jean Daniel, observador de un siglo. “El País” (21-II-2020). 
Naïr, Sami. Amistad, ironía y verdad. “El País” (21-II-2020).
Cruz, Juan.

El periodista español Iñaki Gabilondo (1942).

Hermida, Xosé (texto); Riera, Daniel (fotos). Iñaki Gabilondo. Sentido y sensatez. “El País” Icon 86 (IV-2021).


El periodista mexicano Sergio González Rodríguez (1950-2017)
Sergio González Rodríguez (Ciudad de México, 1950-2017), periodista mexicano, investigador del feminicidio de Ciudad Juárez, que publicó en Huesos del desierto. Publicó El hombre sin cabeza (Anagrama, 2009) sobre las decapitaciones de los narcos y siguió con Campo de guerra (premio Anagrama de Ensayo 2014), en el que estudia los vínculos políticos del narcotráfico, y Los 43 de Iguala, su último libro.
Marcial Pérez, David. Obituario. Sergio González Rodríguez, cronista de la violencia. “El País” (4-IV-2017).

El periodista estadounidense David Halberstam (1934-2007)
Segurola, Santiago. Obituario. David Halberstam, un campeón del periodismo. “El País” (25-IV-2007) 66. 

El periodista estadounidense Joe Khan (1964).
Sánchez-Vallejo, M. A. El poder sereno de la Dama Gris. “El País” Ideas 370 (12-VI-2022). Perfil de Joe Khan, el nuevo director de “The New York Times”, el diario más influyente del planeta.

El periodista francés Jean Lacouture (1921-2015)
Jean Lacouture (Burdeos, 1921-Roussillon, Provenza, 2015), periodista y biógrafo de De Gaulle o Nasser.
Bastenier, M. Á. Obituario. Jean Lacouture, un gran señor del periodismo francés. “El País” (18-VII-2015) 36.

La periodista española Victoria Prego (1948-2024).
Petit, Quino. Muere la periodista Victoria Prego, retratista de la Transición. “El País” (2-V-2024).
Díez, Anabel. La periodista que nunca se sintió famosa. “El País” (2-V-2024).

El periodista estadounidense, Jorge Ramos (Ciudad de México, 1958).
Ruiz Mantilla, Jesús. Jorge Ramos. ‘Estamos viviendo el peor momento en Estados Unidos en décadas, peor que el 11-S’. “El País” Semanal 2.288 (2-VIII-2020). El periodista estadounidense, Jorge Ramos (Ciudad de México, 1958), uno de los más influyentes de EE UU, fue vetado por Trump, pero mantiene su busca de la objetividad, frente a Trump, Nicolás Maduro, Andrés Manuel López Obrador o Fidel Castro. Llegó a EE UU el 2 de enero de 1983 porque en Televisa no le dejaban hacer un reportaje crítico.

El periodista italiano Eugenio Scalfari (Civitavecchia, 1924-Roma, 2022).

Verdú, D. Muere Eugenio Scalfari, fundador del diario “La Reppublica”. “El País” (15-VII-2022).

Cebrián, Juan Luis. Un europeísta del nuevo renacimiento. “El País” (15-VII-2022).


El periodista alemán Peter Scholl-Latour (1924-2014) 
Peter Scholl-Latour (1924-2014), periodista alemán de reportajes y libros sobre Vietnam, Irán...
Müller, Enrique. Obituario. Peter Scholl-Latour, un aventurero eterno. “El País” (2-IX-2014) 38. 


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